{mosimage}La Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-ASAJA) respalda la demanda interpuesta el pasado martes por el letrado Fermín Rabal en nombre de un productor de la variedad Afourer-Nadorcott solicitando la nulidad del contrato de regularización firmado con Geslive. En este sentido, se alega que la entidad exigió el pago de un royaltie a plantaciones anteriores a octubre de 2004, cuando todavía no contaba con el título de protección vegetal que le permitía reclamar un canon por los derechos de la variedad.