AVA-ASAJA alerta de que la producción de arroz valenciana corre peligro tanto por las restricciones fitosanitarias ya en vigor como por las que se impondrán en aplicación de la nueva regulación ahora aprobada por el Parlamento Europeo. "Es necesario que la Administración central, la europea y las grandes empresas de filosanitarios “sean flexibles para que la cosecha no produzca daños sobre el ecosistema de La Albufera y del Marjal Pego-Oliva”, advierte el presidente de la organización agraria, Cristóbal Aguado.
La aplicación de la Directiva 91/414 dejará en breve a los arroceros sin casi alternativas para la lucha contra las malas hierbas y algunos patógenos –como el pulgón- pero especialmente contra las dos principales plagas: el ‘cucat’ y la ‘pyricularia’, que podrían reducir la producción en las zonas afectadas a cero. En el primer caso, la conselleria ha venido ampliando la aplicación de técnicas biológicas (no químicas) hasta el punto de que el control del insecto se realiza hoy íntegramente con técnicas de confusión sexual (feromonas).
No obstante, en ocasiones, se observan focos para los que sería indispensable dejar alguna materia para su uso ocasional. Por ello AVA-ASAJA reclama que se ofrezca una alternativa, para lo cual será necesario que la Administración colabore con la industria fitosanitaria y con el sector en la realización de ensayos y pruebas. En cuanto a la ‘pyricularia’, de las cuatro materias activas hoy existentes, dos no podrán usarse en la próxima campaña y la tercera desaparecerá en 2011.
Al dejar un único fungicida, la repetición de tratamientos provocaría que a medio plazo se den resistencias. Por este motivo AVA-ASAJA reclama que, como en otros Estados miembro, se reconozca una quinta sustancia activa que ahora se usa en otros cultivos. Por otro lado, los tratamientos que se realizan contra este hongo son aéreos, con helicópteros que vuelan a muy baja altura para evitar la deriva, dosis muy controladas y en dos únicas pasadas anuales (julio y agosto) para tirar producto a concentraciones bajas.
La nueva directiva prohíbe las fumigaciones aéreas salvo en circunstancias excepcionales, que AVA-ASAJA cree que se cumplen en este caso. “Los arroceros ya trabajan con muchas limitaciones por cultivar en el seno de un parque natural y sólo falta que, además, se queden sin materias activas contra plagas y enfermedades y se limite aún más el uso de las que queden”, advierte Aguado, quien concluye que de ser así “se daría el efecto contrario al pretendido porque el ecosistema depende del mantenimiento de los arrozales”.
En última instancia AVA-ASAJA muestra su preocupación por el escaso margen de reacción que tendría el sector si se introdujera un nuevo patógeno, como el que ya se ha detectado en algunos arrozales españoles con los ‘quironómidos’ (gusanos rojos y blancos) frente a los que de momento no hay solución.
AVA-ASAJA reclama un mayor esfuerzo inversor destinado al fomento de la lucha biológica y más financiación para investigar fitosanitarios en ‘cultivos menores’, como muchas hortalizas, el caqui o la chufa. La organización agraria reclama a las administraciones que trabajen para amortiguar los efectos de la aplicación de la Directiva sobre Uso Sostenible de Plaguicidas y Reglamento sobre la Autorización y Comercialización de Productos Fitosanitarios cuyos informes se han votado hoy en el Parlamento Europeo.
“Como veníamos advirtiendo será la agricultura mediterránea, que es la que más necesita de los insecticidas, la gran perjudicada por la nueva regulación que pronto entrará en vigor”, advierte el presidente de AVA-ASAJA, Cristóbal Aguado. AVA-ASAJA valora, como ya advirtió tras conocer el compromiso alcanzado el pasado 17 de diciembre entre los negociadores parlamentarios, el Consejo y la Comisión, algunos de los cambios introducidos sobre la ‘apocalíptica’ propuesta realizada en noviembre por la Comisión de Medio Ambiente del PE.
De igual manera, la organización agraria advierte que el alcance del nuevo marco normativo dependerá de su redacción y previsiblemente, su desarrollo dejará un amplio margen de interpretación tanto a los Estados miembros –que debarán de redactar ahora los Planes Nacionales de Acción- como a Bruselas, que deberá supervisarlos.
Pese al intento de mejorar el texto por parte de un grupo de eurodiputados españoles, este acuerdo podría suponer –según los cálculos de ASAJA- la reducción de entre el 9 y el 21% de las sustancias activas. Esta desaparición se debe en parte al desarrollo de una normativa más restrictiva para la autorización, en algunos casos, sin justificación científica alguna, de fitosanitarios lo que podría conducir a una seria disminución del rendimiento de ciertos cultivos y a un aumento de la resistencia de las plagas a las sustancias que queden.
A modo de ejemplo, los cítricos o el olivar podrían ver su producción disminuida entre un 40 y un 80%. Sin embargo, algunas de las cláusulas introducidas a última hora para evitar una retirada masiva de fitosanitarios, podrían dar tiempo al sector y a la industria fitosanitaria para buscar alternativas químicas y biológicas que permitan reducir considerablemente estas mermas. Y serán, ya son de hecho, los cultivos menores -prácticamente todas las hortalizas y algunas frutas- los más perjudicados, puesto que son los que las compañías fabricantes de fitosanitarios más desatienden por ser menos rentables. “España debe luchar ahora porque la Comisión Europea presente lo antes posible la propuesta prometida para crear un fondo comunitario con el que financiar los ensayos fitosanitarios para la autorización de los productos para ‘usos menores’”, señala Aguado.
AVA-ASAJA lamenta especialmente la nueva incongruencia de la UE que supone haber impuesto a los agricultores europeos la regulación de fitosanitarios más exigente del mundo sin mantener la misma exigencia a las de los países terceros. “La producción foránea podrá usar productos prohibidos para los europeos y la falta de controles en las fronteras posibilitará que sigan entrando con tales importaciones nuevas plagas. Pero ahora habrá una diferencia: estaremos más limitados que nunca para poder luchar contra ellas”, augura Aguado. Uno de los elementos más recriminables de este proceso ha sido la ausencia de un estudio oficial del impacto que esta legislación podría tener sobre la producción agraria, la disponibilidad de alimentos, la renta y el empleo de las zonas rurales y los efectos en materia de sanidad.
En este sentido, AVA-ASAJA lamenta las declaraciones vertidas por una de las ponentes de la nueva regulación, Hiltrud Breyer (Los Verdes) quien ayer tildó la votación de hoy como “una decisión histórica, porque la UE se ha situado del lado de los consumidores, de la salud y no se ha arrodillado ante la industria”. Para Aguado lo “realmente triste es que alguien tan ignorante y tan desinformado, tan lejano al campo y a la propia sanidad, haya sido la máxima impulsora de esta regulación”.
La Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-ASAJA) estima que las heladas que se han producido durante las dos últimas madrugadas han ocasionado daños leves en campos de cítricos y hortalizas de las comarcas litorales y de interior. Según los servicios técnicos de AVA-ASAJA, habrá que esperar a que termine este episodio de frío polar para poder apreciar las posibles mermas de producción. Los cultivos más afectados han sido las alcachofas, las habas y la coliflor, especialmente en Camp de Turia.
Así, el frío ha perjudicado el aspecto externo de las hortalizas, quemándolas, y en algunas partidas la calidad del producto se ha visto afectada. En cuanto a los daños en otro tipo de verduras de invierno en la misma comarca, cabe destacar que las coles, espinacas y lechugas han amanecido con escarcha y habrá que espera la evolución del cultivo para comprobar su posible recuperación. En todas las comarcas citrícolas las heladas han sido aisladas y su intensidad muy variable según la ubicación de la parcela cultivada, pero en general leves.
No obstante, los servicios técnicos de AVA-ASAJA valoran que la cantidad de horas-frío de este temporal es muy favorable para el descanso invernal de algunos árboles frutales como melocotón, nectarina, albaricoque o cereza. “Siempre es bueno que haga frío con mesura ya que la fruta de verano depende en parte de un invierno como toca. Ahora bien si las bajas temperaturas persisten durante varios días y afectan al litoral tendremos que empezar a preocuparnos”, afirma el presidente de la organización agraria Cristóbal Aguado, quien añade “que es hora de pasar los partes de siniestro, realizar las peritaciones y cuantificar los daños”.
En cuanto a las bajas temperaturas, en la Hoya de Buñol, han sufrido cinco grados bajo cero algunas zonas y destacan, además, los cuatro grados bajo cero de algunos municipios de Camp de Turia o La Ribera Alta.
El presidente de AVA-ASAJA, Cristóbal Aguado, ha descrito como una “burla grotesca al consumidor y al productor” la campaña publicitaria iniciada recientemente por Don Simón para promocionar sus zumos de naranja. En los anuncios televisivos que vienen apareciendo desde mediados de diciembre, la marca sugiere que sus jugos ‘recién exprimidos’ tienen más propiedades nutritivas que las naranjas frescas.
Es más, la campaña vuelve a incidir en esta comparación al venir a concluir en un segundo spot que resulta más barato adquirir sus ‘tetabricks’ refrigerados que comprar los cítricos directamente en la frutería. “García Carrión ha consagrado una estrategia provocadora basada en medias verdades pero ahora ha llegado más lejos y parece aspirar al absurdo de competir, no con otras marcas de zumo, sino con las propias naranjas en fresco”, advierte Aguado quien llama por este motivo a los consumidores al boicot contra esta marca.
AVA-ASAJA recuerda en este sentido que, pese al mensaje deliberadamente ambiguo y confuso lanzado por esta industria, los zumos directos a los que se alude en tales anuncios –como todos los demás- son sometidos a pasteurización para eliminar los posibles gérmenes, por lo que necesitan conservarse bajo refrigeración. En cualquier estudio mínimamente riguroso se aclara que el proceso térmico aplicado a los cítricos altera sus cualidades nutritivas, cosa que no ocurre con las naranjas frescas que, independientemente de su fecha de recolección, conservan casi íntegramente tales cualidades.
“Sugerir o tratar de conducir a engaño al comparar las propiedades de los cítricos frescos y su zumo natural con los jugos industriales es incluso ofensivo para la inteligencia de los consumidores”, señala el presidente de esta organización agraria. Ni siquiera es ajustado el describir a este producto como “recién exprimido” –como se remarca en sendos anuncios- porque por éste se entiende el que es obtenido para consumirlo en el acto, sin tratamiento posterior alguno.
Don Simón acumula, por otra parte, un denso currículum de campañas publicitarias confusas, que han merecido la reprobación del Jurado de Autocontrol, la Asociación para la Autorregulación de la Comunicación Comercial que está integrada por las principales agencias de publicidad, anunciantes y medios de comunicación del país. Sin ir más lejos, en 2007 este organismo de arbitraje extrajudicial obligó a este sello a eliminar de sus anuncios la referencia a que sus jugos eran “cien por cien naturales”. AVA-ASAJA va a presentar en breve una reclamación ante esta organización y ante el propio Ministerio de Sanidad y Consumo instando a que se retire cuanto antes tan nociva e inoportuna campaña.
AVA-ASAJA denuncia que la falta de liquidez que arrastran los viticultores de Utiel-Requena se ha visto agravada por la dinámica de esta campaña, en la que las ventas siguen paralizadas, lo que ha provocado que se retrasen las labores agrarias propias de la época. “La improvisación y el retraso del Gobierno a la hora de concretar las medidas de la nueva OCM del Vino está agravando la caída del consumo y de la demanda de vino que se sufre a causa de la crisis económica”, denuncia el presidente de AVA-ASAJA, Cristóbal Aguado.
Efectivamente, según estima la organización agraria, a estas alturas de la campaña los productores de la comarca de interior valenciana sólo han podido colocar en torno al 15% de la cosecha cuando en las mismas fechas de la pasada temporada ya se había vendido alrededor del 50%. La falta de ingresos por parte de los viticultores se está viendo alimentada, además, por el retraso en la concreción del paquete de medidas del programa de apoyo al sector vinícola vinculado a la nueva OCM del vino que, cuatro meses más tarde de iniciarse la vendimia, aún no han sido aprobadas.
Un hecho que también está facilitando la parálisis en las compras en origen de bodegas y cooperativas, que no sólo sufren la falta de demanda sino que además no pueden planificar la campaña por la incertidumbre que aún rodea a medidas como la destilación de uso de boca y que ven como su cuota de mercado está siendo ocupada por los caldos de otras procedencias, como los italianos o franceses. En estas fechas los viticultores deben afrontar los gastos derivados tanto de la poda como del llamado ‘abonado de fondo’, que supone la fertilización con materia orgánica o mineral.
Retrasar ambas labores no sólo podría encarecer el proceso sino que también supondría provocar mermas en la calidad futura de las vides. Pero difícilmente un productor se va a decidir a afrontar tales inversiones si, por ejemplo, aún no sabe si sus explotaciones han sido beneficiadas o no de las primas para el arranque voluntario de vides. Conviene recordar a este respecto que desde la Comunitat se cursaron casi 3.000 solicitudes de arranque y que sólo 1.434 fueron atendidas. Sin embargo, aún no se han publicado las resoluciones identificando a los beneficiarios de tales primas.
Tampoco contribuye en nada a que los viticultores se decidan a iniciar la poda o el abonado el hecho de que todavía no se conozca qué será de los planes de reconversión o reestructuración de los viñedos, cuya partida el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural parece estar abocado a reducir para así obtener fondos para la destilación de uso de boca. “Los productores no sólo sufren el parón en las compras sino que además se ven perjudicados por la incertidumbre que el Gobierno está generando en los mercados y en el campo en torno a la gestión de la nueva OCM de Vino, que ya advertimos que en poco podría contribuir a aliviar situaciones de dificultad”, concluye Aguado.
AVA-ASAJA denuncia la “mala fe” demostrada por el Ministerio de Industria que, presionado seguramente por las eléctricas y sin advertirlo ni negociarlo con las organizaciones agrarias, ha impuesto cambios de última hora en los horarios que marcan los precios de los riegos de alta tensión así como en las tarifas de baja tensión. Así lo recoge hoy, 31 de diciembre, el Boletín Oficial del Estado (BOE) en la orden ITC/3.801/2008 de 26 de diciembre por la que se revisan las tarifas eléctricas a partir del 1 de enero de 2009.
Según un estudio de AVA-ASAJA, en lo que llevamos de campaña los citricultores acumulan ya 134 millones de euros en pérdidas a causa de la ‘venta a pérdidas’ a la gran distribución por parte del comercio. El dato ha sido anunciado esta mañana por el presidente de esta organización, Cristóbal Aguado, en el transcurso del tradicional balance agrario anual. Para Aguado, 2008 viene marcado, además, porque el problema estructural de abandono de campos y de falta de relevo generacional en el campo se ha acelerado por el “brutal” aumento de todos los costes de producción –fitosanitarios, fertilizantes, energéticos para el riego y el gasóleo- además de por el nuevo repunte en la inseguridad en el campo, que ya ha provocado el primer incidente en el que un agricultor se ha defendido a tiros frente a los delincuentes.
El líder de AVA-ASAJA, además, ha achacado la desconvocatoria del paro citrícola no sólo a la buena predisposición negociadora de la Generalitat sino fundamentalmente a la falta de “implicación” del comercio en la movilización. La presión de la gran distribución ha provocado, según el citado estudio, que la comercialización de mandarinas clemenules/orogrande se haya realizado a una media de 0,12 €/kg por debajo de los costes, lo que ha supuesto unos 72 millones de euros de pérdidas asumidas por los citricultores.
En idéntico sentido, la venta de naranjas Navelina acumula un déficit 0,06 €/kg lo que supondrá que el citricultor sufra una merma en sus rentas de otros 42 millones. Por último, las clementinas (Oroval, Marisol, Mioro, Loretina, Oronules, Nules y Orograndes) que no se recolectaron por los daños causados por las lluvias de octubre o por el exceso de madurez acumulado suponen otros 20 millones. “En cualquier empresa, la venta a pérdidas supondría su desaparición. El abuso de la gran distribución está matando a los citricultores y está impidiendo que el sector agrario sea el motor para salir de la crisis”, ha denunciado Aguado. En este sentido, el presidente de AVA-ASAJA ha alertado que la permisividad del comercio citrícola con la venta a pérdidas -sabiendo que pese al incremento de la producción la fruta comercial está siendo la misma que en la temporada pasada- supone el “inicio de una nueva y penosa etapa en la citricultura”.
En este mismo sentido ha matizado que, frente a esta situación, las principales organizaciones agrarias valencianas convocaron un paro citrícola que, finalmente, ha tenido que ser suspendido no tanto por la buena disposición a la negociación de la tabla reivindicativa propuesta a Generalitat, sino por la falta de “implicación” de los operadores comerciales valencianos. “La mayoría no estuvo dispuesto a no trabajar y sólo el comercio es el que tiene capacidad para paralizar la cadena”, ha asegurado Aguado quien, pese a todo, ha reseñado que en “algún momento se tendrá que hacer una gran protesta”.
Por otra parte, el dirigente agrario ha lamentado la falta de atención al sector citrícola prestada por el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural, que recientemente se limitó a contestar por carta a la petición de una reunión urgente con la ministra Elena Espinosa remitiendo la cuestión al secretario general del departamento, Josep Puxeu. “La falta de interés demostrada por el Gobierno con un sector que da trabajo diariamente a más de 150.000 personas contrasta con la atención prestada a otros sectores como la banca, la construcción o los automóviles. Tomamos nota”, ha remarcado Aguado.
El año 2008 será recordado también por el espectacular repunte de todos los factores de producción. Así, durante el ejercicio que ahora acaba la subida del precio de los fitosanitarios se ha situado entre el 8 y el 102% y la de los fertilizantes entre el 36 y el 234%. De igual manera, en el momento en el que se concentraron la mayor parte de las labores agrarias que son mecanizadas (inicio de la campaña arrocera, citrícola y la vendimia) el gasóleo agrícola alcanzó su máximo con una subida de en torno al 60%.
Por último, la energía eléctrica necesaria para la extracción de las aguas subterráneas del regadío valenciano se ha encarecido un 30% por efecto de la llamada liberalización de las tarifas y, en el caso de las comunidades de regantes que no hayan formalizado nuevos contratos, la subida acumulada llega ya al 50% debido al recargo sumatorio aplicado todos los meses. “La liberalización de la energía no es real, entre otras cosas, porque deberíamos tener la posibilidad de ir a contratar la electricidad allá donde ésta sea más barata, como en Francia”, ha denunciado Aguado.
Para finalizar, el líder agrario ha lamentado la escalada de inseguridad que, lejos de remitir, azota al campo. Así, ha aludido a los últimos desgraciados incidentes en los que varios agricultores resultaron gravemente agredidos, apaleados incluso, por los delincuentes en sus propias propiedades. Una oleada de robos de cosechas, en pozos de riego y granjas que en las últimas fechas provocó que un agricultor hastiado por la situación repeliera a unos atacantes con tiros. “Lo veníamos advirtiendo y al final ha pasado. Es necesaria una acción conjunta de todas las administraciones para garantizar mayor seguridad en el campo y que el Gobierno se decida, de una vez por todas, a promover cambios en el Código Penal para endurecer este tipo de delitos. Si no es así todo esto irá a peor”, ha advertido Aguado.
El 18 de diciembre el Consejo de Europa y el Parlamento Europeo (PE) llegaron a una posición común sobre la futura regulación de fitosanitarios de cara a la votación de mediados de enero en el legislativo europeo. AVA-ASAJA valora algunos de los cambios introducidos sobre la ‘apocalíptica’ propuesta de la Comisión de Medio Ambiente del PE pero advierte de que el alcance del acuerdo dependerá de su redacción y previsiblemente, su desarrollo dejará un amplio margen de interpretación tanto a los Estados miembros como a Bruselas.
“En cuanto se apruebe la propuesta habrá que estar muy atentos a la fase de redacción tanto de la directiva como del reglamento porque de la letra pequeña dependerá buena parte del impacto negativo que, pese a todo, seguro se dará sobre la producción mediterránea”, matiza el presidente de esta organización, Cristóbal Aguado, quien postula, además, la conveniencia de crear una mesa nacional donde se dé cabida a las autonomías y a los productores para coordinar la aplicación de la norma en nuestro país.
AVA-ASAJA lamenta que las instituciones europeas hayan terminado de perfilar el nuevo marco legal sin antes haber realizado un estudio sobre el impacto que éste supondrá tanto en la disponibilidad de materias activas como en la producción agrícola y sanidad vegetal. De igual manera, la organización discrepa sobre la visión triunfalista que avanzó el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural la semana pasada, que señaló que el pacto alcanzado había logrado reducir la futura eliminación del 80% de las materias activas hoy usadas en la agricultura mediterránea a sólo el 10%.
A este respecto, la organización advierte de que sólo la definición del criterio de exclusión referido a las materias que tengan efectos como disruptor endocrino –que se ha quedado sin concretar- podría elevar mucho este porcentaje. Por este motivo, AVA-ASAJA recomienda al Ejecutivo español que medie ante los europarlamentarios para que se vote de forma separada el texto referido a éste y al resto de criterios de corte planteados. En este sentido, cabe destacar que los fitosanitarios que en el futuro quedarán prohibidos dependerá del riesgo real que se estime para cada uno de esos criterios para lo cual se impone que tales análisis los realicen expertos científicos independientes. AVA-ASAJA valora como muy positivo el paso dado para la armonización de normativas con la creación de tres zonas dentro de la UE en la que el reconocimiento de una sustancia activa por parte de un Estado miembro suponga la asunción de la misma por parte del resto.
Sin embargo se ha establecido una discrecionalidad, basada en circunstancias medioambientales o agrícolas, que amenaza con convertirse en un nuevo factor de distorsión. En idéntico sentido la organización reconoce avances en cuanto a la excepcionalidad permitida para mantener durante cinco años un producto amenazado de eliminación cuando éste no tenga alternativa y suponga una amenaza contra la salud vegetal. Junto a ello, se ha permitido justificar, por motivos excepcionales, posibles fumigaciones aéreas. La organización agraria valenciana se ha significado por su protagonismo en la discusión de esta normativa, que ha sido y es duramente criticada.
Durante estos meses, miembros de AVA-ASAJA han aportado informes y mantenido encuentros con destacados miembros de todas las instituciones europeas involucradas y ha participado en seminarios, congresos y grupos de trabajo convocados a este respecto.
La Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-ASAJA) muestra su “comprensión” al agricultor de Almenara que disparó a los ladrones que estaban hurtando alcachofas de su huerto, “dada la reiteración de los robos de cosechas y equipamientos de riego en el campo y dada la crispación y la desconfianza de los agricultores hacia una Administración que no cumple su respon-sabilidad para atajar la inseguridad en el medio rural”.
Durante la reunión de delegados de AVA-ASAJA celebrada ayer en Valencia, todos los delegados de la organización agraria criticaron la situación de los robos de “insostenible” y reclamaron por unanimidad “un endurecimiento del Código Penal que proteja a los débiles, los agricultores, que están sufriendo una oleada de delitos sin la justicia que reclama el sector agrario”.
“Si hubiera una mayor vigilancia en el medio rural y se aplicara una justicia más dura para los delincuentes, los ladrones no robarían tantas veces y con tanta impunidad a gente como la detenida el miércoles en Almenara que lo que quiere es vivir como agricultor de una forma digna”, destaca Cristóbal Aguado, presidente de AVA-ASAJA, “pero con esta dejadez de responsabilidades de la Administración parece que quieran echarnos del campo”.
Reforma del Código Penal
La reforma del Código Penal anunciada por el Gobierno pretende incluir cambios legislativos que penalicen la reincidencia de algunos delitos que generan una amplia repulsión social como el terrorismo, la pederastia y el tráfico de menores. “Es urgente que se refleje además penas más duras para la delincuencia organizada de las bandas especializadas en asaltos en el medio rural”, añade Aguado.