Representantes de las principales organizaciones agrarias (AVA-ASAJA, LA UNIÓ Llauradora i Ramadera, ASAJA Alicante, UPA-PV y CCPV-COAG) y de las cooperativas valencianas han viajado a Bruselas acompañados por el president de la Generalitat, Carlos Mazón, y el conseller de Agricultura, Ganadería y Pesca, José Luis Aguirre, para trasladar a las instituciones comunitarias la gravísima situación por la que atraviesan la agricultura y la ganadería valencianas.
A lo largo de este viaje, la delegación valenciana ha mantenido diferentes encuentros con representantes del Parlamento Europeo, del Comité de las Regiones y de la Comisión. De igual forma, ha participado en el evento “Cultivando el futuro: desafíos y soluciones para una agricultura regional europea”, donde se ha presentado un documento de posición consensuado, que cuenta con el pleno apoyo de la Generalitat.
En este documento, expuesto por el director de Cooperatives Agro-alimentàries, Enrique Bellés, se incide en que “tras las grandes cifras macroeconómicas, se esconde una profunda crisis estructural”, provocada, entre otros aspectos, por “una serie de decisiones políticas adoptadas por las instituciones comunitarias”, que “permiten elementos diferenciadores en las condiciones de producción y comercialización, y que afectan de modo muy directo a la competitividad de las producciones europeas”.
Asimismo, denuncia que el escenario actual provoca que a los agricultores y ganaderos no les salgan las cuentas, mientras parece que en las instituciones comunitarias “no se tiene una percepción real de que hay un problema”.
Propuestas del sector productor
El documento también aborda una batería de propuestas realizadas por el sector productor valenciano, entre las que se incluyen la adaptación de los objetivos medioambientales del Pacto Verde a su realidad económica y social; la eliminación de burocracia y la simplificación de la PAC; mayor firmeza en la toma de decisiones tras la detección de envíos procedentes de terceros países contaminados con plagas de cuarentena; mantener la autorización de uso de materias activas mientras no haya alternativas biológicas o biotécnicas viables; exigir reciprocidad a terceros países en la limitación de uso de dichas materias; o impulsar las cláusulas espejo en los acuerdos comerciales.
De igual manera, se incide en cuestiones como la modificación de las normativas comunitarias sobre funcionamiento de la cadena alimentaria y buenas prácticas comerciales; el apoyo real a la incorporación de jóvenes y mujeres a la actividad agraria; y la petición de una mayor implicación de las instituciones comunitarias en la resolución de los problemas denunciados sistemáticamente por agricultores y ganaderos.
Está en juego el futuro del sector
Los representantes de las organizaciones participantes en este viaje de trabajo han asegurado que “siempre es importante tener la oportunidad de exponer directamente nuestros problemas y reivindicaciones ante las personas responsables de la toma de decisiones que nos afectan profundamente” y han mostrado su deseo de “venir las veces que sea necesario, para que esto no sea una visita aislada y podamos desarrollar una verdadera acción de lobby de la agricultura valenciana”.
Asimismo, esperan que “esta visita, que se enmarca en un contexto global de protestas del sector agrario a nivel europeo, sirva para trasladar una realidad que no se puede ocultar: que los agricultores y ganaderos son el eslabón más débil de la cadena alimentaria y que, de mantenerse la situación actual sin acometer los cambios profundos que son necesarios, estaremos condenando el futuro y la viabilidad de miles de explotaciones agrarias y ganaderas”.